Las Fiestas de Remedios une La Palma y Lanzarote a través de la poesía y el folklore
El Festival Rubicón regala una muestra cultural de ambas islas con el buen hacer de las agrupaciones folklóricas Los Arrieros de Los Llanos de Aridane y Rubicón de Yaiza.
La unión en un encuentro romántico representado en la plaza del pueblo de Yaiza por la expresión poética y cultural de La Palma y Lanzarote a través del canto, el toque y el baile de las agrupaciones folklóricas Los Arrieros, del municipio palmero de Los Llanos de Aridane, y Rubicón, del lanzaroteño municipio de Yaiza, engalanaron las Fiestas de honra a la Virgen de Los Remedios este viernes en una edición más del Festival Rubicón.
“Dos miradas que se buscan, dos abrazos que no llegan, y en el medio…el mar…”; a partir de los versos ‘Aires de Anhelos’ escritos por César Rijo, miembro del cuerpo de baile de Rubicón, las dos agrupaciones protagonistas desarrollaron durante casi dos horas la alegoría que interpretó la fusión de dos ínsulas cercanas.
El buen hacer de Los Arrieros, fundada en 1970, siendo una de las agrupaciones señeras de Canarias, y de Rubicón, que a pesar de su juventud (2001) también puede presumir de trayectoria en el Archipiélago, dejó un grandísimo sabor de boca entre la asistencia que abarrotó la plaza.
Desde la entrada en escena de una chica de Los Arrieros y de un chico de Rubicón que salieron de la penumbra hasta encontrarse, fundirse en un abrazo y bailar, la asistencia se enganchó al espectáculo. Llegaron entonces la sucesión y alternancia de cantos y bailes de La Palma y Lanzarote por dos grandes exponentes del folklore cuidadosamente ataviados con trajes típicos, como lucía el escenario de Remedios con su atrezo especialmente decorado para la ocasión.
Y si Rubicón reivindicaba a Lanzarote con sorondongo e isa de la figura, Arrieros hacía lo propio con La Palma cantando y bailando su berlina y folías. Sobre la noche sureña fueron cayendo seguidillas y malagueñas, interpretadas por Rubicón, y garinga y danza del trigo, por Arrieros, toda una muestra de la diversidad cultural de las Islas que el público reconoció con aplausos.
Rubicón, que también se echó unas folías, hizo su particular homenaje a la memoria del extraordinario folklorista conejero Ico Arrocha, con el recuerdo vivo de la isa del uno. Arrieros respondió seguidamente con siote e isa del calabazo, siempre explicando el origen de cada pieza que en este último caso se trata de un guiño al regadío.
Otro momento emotivo de la noche fue el ofrecimiento que hicieron ambas agrupaciones al desaparecido Juan Brito. Arrieros y Rubicón bailaron juntas la saranda, autoría del folklorista y artesano lanzaroteño que murió el pasado mes de febrero. Superado el reto, las agrupaciones, que sumaron casi un centenar de artistas en tarima, hicieron la despedida del Festival con la alegre isa parrandera.
En esa catarata de emociones y confraternización no podía pasar desapercibido el hecho de que Heriberto Sánchez, hoy solista de Rubicón, estuvo en Arrieros. Sus todavía compañeros de La Palma quisieron rendirle un homenaje público en el Festival. La dirección musical de Los Arrierros la ejerce Gerardo Carmona mientras que Zaida Pedrianes es la directora del cuerpo de baile, por su parte, en Rubicón, Roberto Gil lleva la dirección del cuerpo de toque y Magdalena Cáceres el baile.
Las agrupaciones intercambiaron regalos y exteriorizaron su gratitud, tiempo en el que Rubicón también aprovechó para entregar obsequios a las firmas, personas y entidades colaboradoras del Festival, entre ellas, el Ayuntamiento de Yaiza, representado por el alcalde, Óscar Noda, y los concejales de Festejos y Cultura, Javier Camacho y Daniel Medina, respectivamente. El Festival Rubicón ya es una cita ineludible en el circuito cultural de Lanzarote.
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